8. Testimonio de Pedro con los once

Después de dar testimonio de la obra del Espíritu Santo como cumplimiento de las Escrituras proféticas, Pedro proclama un solemne testimonio sobre quién es Jesús: es el “kerygma”, la buena nueva que debe anunciarse por el mundo entero. Jesús es el Hijo de Dios, muerto y resucitado.

  • Hechos de los Apóstoles 2, 14-21