1. Definición de la Familia de Magdala

Esta cápsula se graba en el mosaico del mapa de Galilea que simboliza la imagen de la Familia de Magdala, pues cada tesela, cada pieza del mosaico, representa un individuo. Y un conjunto de individuos conforman un todo, una comunidad. Esto se refleja en la definición de la Familia de Magdala: “La Familia de Magdala es una comunidad inspirada por la experiencia de Tierra Santa y de Magdala, que lleva el encuentro con Dios y se compromete con la extensión de su Reino en el mundo”.

La Familia de Magdala es una comunidad, un grupo de personas que tienen un propósito, una visión y una misión. Esta comunidad es fundamentalmente de índole religiosa, que está inspirada por la experiencia de Tierra Santa y Magdala y nos lleva a tener un encuentro con Jesús, a un mayor conocimiento, a través de los pasajes de la Biblia, de su vida y de los lugares por donde caminó, vivió, murió y resucitó. Tras esta experiencia, sentimos la necesidad de compartirla con otros y, entonces, pasamos a comprometernos con la extensión del Reino de Dios en el mundo.  

En esto consiste ser miembro de la Familia de Magdala: en buscar que el mundo sea mejor, buscar que los valores de la Biblia y del Evangelio se difundan, se conozcan, se contagien a través de nuestro ejemplo, de nuestras palabras, de nuestras acciones concretas para que el Reino de Dios, un reino de amor, de verdad, de paz y de justicia, se extienda en el mundo con los medios que dispongamos a través de la Familia, con la Familia o desde la Familia de Magdala.

La experiencia de Magdala, de esta pequeña parte de la Tierra Santa, ya sea de forma presencial o a través de las peregrinaciones virtuales, nos da una base sólida de nuestra fe, de la práctica religiosa de los sacramentos, de nuestra oración, de nuestra relación personal e íntima con Dios. Todo esto se asienta en un cimiento sólido que es la Tierra Santa, la tierra de la Revelación, y da un sentido a nuestra fe y a nuestra vida espiritual.